La pareja checa le dio la vuelta al partido y sumaron su tercer punto contra los españoles
F. Estellés/ @siskoestelles
Solo un milagro puede meter a España en las finales que se celebrarán en Málaga. Solo vale la victoria ante la Serbia de Djokovic este viernes, hacer lo propio contra la República de Corea, y visto lo visto hoy en La Fonteta, en los partidos contra la República Checa parece casi imposible porque hoy los centroeuropeos han batido con claridad a los españoles en los dos partidos individuales, contra Zapata primero, y Davidovich después, para cerrar una jornada perfecta con la victoria, con remontada, ante la pareja formada por Granollers y Davidovich.
Y es que en un partido vibrante para cerrar la jornada, España se agarraba a los dobles para tener un hilo de esperanza de cara a la clasificación, sin embargo la pareja checa formada por Mensik y Pavlasek consiguieron darle la vuelta al marcador y cerrar el partido en el tercer set, sumando así el tercer punto para su país en un choque frenético en el que España se desinfló en la última y decisiva manga.
En un primer set igualado la veteranía de Granollers y la experiencia en el dobles tiró de la pareja para cerrar un primer set emocionante y de gran calidad. Así se llegó al segundo, y con un juego eléctrico y mucho convencimiento en cada acción los checos llevaron el set al desempate para empatar la segunda manga en el tiebreak.
Con todo por decidir los nervios y el cansancio aparecieron en las raquetas españolas ante la pareja checa que creyó en la remontada y acabó por cerrar el partido en el décimo juego y cerrar el marcador con 7-5, 6-7 y 4-6. Con este resultado la República Checa se pone 0-3 y deja a España al borde del abismo.