F. Estellés/ @siskoestelles
Victoria vital. Tres puntos de oro trabajados a hierro y fuego ante una gran Real Sociedad que demostró por qué es el tercer equipo de LaLiga. Solidario en defensa, incisivos y directos en ataque, los blanquinegres se llevaron un partido con ocasiones en ambas áreas donde el Valencia supo romper, a la contra, el orden Txuri-urdín, y un gol en propia tras jugada de Lino, dio la victoria al Valencia. En el segundo acto, las contras de los blaquinegres pudieron sentenciar a la Real que se volcó al ataque en el segundo tiempo. Victoria merecida. El Valencia respira.
Partido a vida o muerte en Mestalla. El Valencia recibía a la Real Sociedad de Imanol Alguacil en un partido dramático para los blanqunegres que vivían en la zona de descenso de la tabla contra el equipo donostiarra que acariciaba una tercera posición mirando a la cara a Barça y Real Madrid.
Con muchas bajas en el Valencia tras la lesión de Gayá, Marcos André y la ya conocida de Cavani, Baraja afrontaba un partido decisivo en un Mestalla a rebentar que se manifestó antes del partido contra Meriton pero que desde el primer minuto alentó a su equipo para empujarlo hacia la victoria.
Arrancó el partido con la Real Sociedad dominando el cuero y el Valencia cerrando filas. Control donostiarra pero orden blanquinegre en un choque intenso y cerrado en los primeros compases. Así en el once Oyarzabal tras una combinación de los visitantes, recibió en la izquierda para sacarse un disparo sorpresivo desde el pico del área para que Mamardashvili sacara el disparo del delantero vasco. Susto.
Reaccionó el Valencia con un juego más directo y cerrando filas, y con verticalidad gracias a Lino y un Castilejo que pedía el balón. En el centro del campo Yunus se multiplicaba en las ayudas junto a Guillamón para tapar la creación de Merino y el veneno de un Sorloth amenazante en punta.
Maduraba el Valencia el partido con más dominio y desde atrás para tapar la calidad donostiarra. Juego directo, duro, de pie firme y máxima intensidad, en el cuarenta Lino recibió en la medular, arrancó la moto y se fue directo a la meta de Remiro. Levantó la cabeza para ponérsela a Castillejo pero su disparo lo desvió Zubeldia para hacer el 1-0 en propia y dar la primera alegría a la parroquia valencianista.
Cinco minutos de alegría, cinco minutos para aguantar el resultado e irse a los vestuarios con la ventaja y la ilusión intacta para poder soñar con la victoria.

Ocasiones, tensión y alivio
Con polémica empezó el segundo acto con un penalti no pitado sobre Hugo Duro por el VAR. El colegiado no apreció contacto suficiente sobre el de Getafe en una acción tan controvertida como clara. Contacto hubo, pero no suficiente. El partido en un puño y Mestalla un manojo de nervios.
Kubo, Brais, Merino echándose el equipo a sus espaldas y el Valencia a defenderse y a correr. En una contra el Valencia cogió a la Real al ataque y Castillejo lo hizo todo hasta plantarse en la frontal y sacarse un derechazo que Remiro sacó de estirada. Era el dos cero, pero el portero visitante lo negó-
Apretaba la Real pero este Valencia empezaba a convencerse desde detrás y muy ordenado no dejaba pensar a los txuri urdines. Solidaridad en defensa, trabajo y una afición entregada desde la grada llevando a su equipo en volandas. Brais la pedía en el pico del área pero las dos líneas valencianistas esta vez sí se aplicaban para tapar cualquier mínima línea de pase.
Sacó piernas frescas Baraja y en el sesenta y dos entró Thierrry por Castillejo, y diez minutos después lo hicieron Jesús Vázquez e Ilaix por Lato Y Musah. Y la primera que tuvo el hijo de Braulio casi acaba en gol en una contra de manual en la que Lino la dejó de tacón y de espaldas al chaval, para que tras un recorte soltara un zurdazo y lo sacara Remiro. Era casi el segundo, pero la bola no entró.
En la siguiene jugada Lino se marcó otro jugadón con disparo que solo el palo evitfó el gol. La Real sin perder la cara. El Valencia apretando los dientes, y los donostiarras al ataque pero esta vez los blanquinegres cerraban filas, no caían en el cansancio y se dejaban la vida mientras Baraja sufría como si estuviera todavía llevando el peso del Valencia.
Diez minutos para el final y siete de prolongación. Y no, no se sufrió en exceso porque los chavales se dejaron la vida en Mestalla, pero la agonía y mal fario no dejaban tranquila a una afición que animaba y empujaba como siempre, como nunca, como Mestalla… Y tiró de oficio un equipo que en el noventa y cinco era todo alma. Y apretó el Valencia, y el partido murió en el noventa y ocho con Mestalla hecha un manojo de nervios, y con la liberación del pitido final. Victoria. Tres puntos de oro trabajados, merecidos, ante un digno y gran rival. Valencia volvió a ser el Valencia. A respirar.
Ficha técnica
1. VALENCIA CF: Mamardashvili, Foulquier, Gabriel Paulista (Cömert, 46’), Diakhaby, Lato (Jesús Vázquez, 77’), Hugo Guillamón, André Almeida (Cenk, 90’), Yunus Musah (Ilaix Moriba, 77’), Samuel Lino, Samu Castillejo (Thierry Rendall, 63’) y Hugo Duro.
0. REAL SOCIEDAD: Remiro, Barrenet (Sola, 46’), Zubeldia, Le Normand, Rico, Zubimendi, Take Kubo (Carlos Fernández, 73’), Brais Méndez (Illarramendi, 73’), Merino, Oyarzabal y Sorloth.
GOLES: 1-0 Zubeldia (p.p.), 40’.
ÁRBITRO: Hernández Hernández (C. Canario). Amonestó a Zubimendi, Foulquier, Diego Rico, Yunus Musah, Samu Castillejo, Lato, Mamardashvili,
VAR: González González (Castellano-Leonés).
Partido de la Jornada 23 de LaLiga disputado en el Camp de Mestalla.