F. Estellés/ @siskoestelles
Partido amistoso del Valencia en Arabia Saudí. Bolo entre semana para hacer caja y recuperar las sensaciones de equipo grande de Europa. Los de Marcelino jugaban este miércoles en oriente próximo, en el estadio Prince Faisal Bin Fahad, para medirse al Al Nassr FC en un partido sin más trascendencia que la de mostrar una buena imagen además de embolsarse alrededor de medio millón de euros. (0-0) Empate sin goles en un amistoso intrascendente.
Y es que lo que aconteció este miércoles en el estadio saudí, al menos durante gran parte del partido, fue lo más parecido al surrealismo; tal y como recoge la RAE sobre el movimiento artístico y literario francés, fue un espectáculo casi indescriptible, algo, «que intenta sobrepasar lo real y onírico mediante la expresión automática del pensamiento o del subconsciente.».
Con más de diez minutos de retraso sobre el horario establecido se enfrentaron un equipo, el local en el que iba a jugar con mitos futbolísticos tan reconocibles como Del Piero, Ronaldinho, Deco o Hernán Crespo, y el Valencia CF, que empezó a jugar con un once con muchas variaciones pero sacó al césped del estadio saudí un conjunto muy competitivo con la presencia de hombres importantes para la plantilla como Neto, Garay, Murillo, Lato, Kondogbia, Rodrigo o Zaza, por aquello de dignificar el espectáculo.
Sin embargo, ni por esas, puesto que el partido, atípico por las condiciones y la hora, también lo fue por el formato porque se jugaron treinta minutos en cada parte, debido en principio a la climatología adversa en la que el termómetro se acercaba a los cuarenta grados.
El partido, poco más que una pachanga para homenajear a un futbolista saudí, ni tuvo emoción ni ritmo entre un equipo profesional, el Valencia, y otro, el Al Nassr repleto de ex futbolistas fondones, otrora grandes astros del balón… Con estos aditamentos los de Marcelino saltaron al pasto saudí para completar el paripé y ser el convidado de lujo. La primera media hora fue un espectáculo un tanto grotesco, por decirlo de alguna manera.
Surrealismo en estado puro
En la segunda parte ambos conjuntos cambiaron prácticamente la totalidad de sus hombres para disputar el ‘simulacro’ de partido de fútbol, pero hete aquí que a los tres minutos de reanudarse el encuentro sonó una oración y el colegiado detuvo el partido durante tres minutos para que la gente rezara, la realización televisiva se fue a un plano general del estadio durante el periodo de oración…
Tras el paréntesis ambos equipos mostraron más intensidad en el juego con varias aproximaciones, sobre todo por parte del Valencia con un incisivo Guedes y la aparición de Carlos Soler en línea de tres cuartos para crear algunas ocasiones de gol en la puerta saudí. También con un juego duro por parte del equipo local que se empleó con contundencia en algunos lances del partido. Afortunadamente no hubo que lamentar ninguna lesión.
Pudo marcar el Valencia tras una falta desde la frontal del área que provocó Vietto y ejecutó Parejo, pero su disparo se fue rozando la escuadra local. Tan solo cinco minutos después, tras una combinación por banda izquierda Guedes pudo marcar de nuevo en una ocasión que la defensa local sacó bajo los palos de la portería saudí.
No hubo goles (0-0), poco más de sí dio el extraño amistoso que disputó el Valencia contra el Al Nassr. El sábado vuelve La Liga para el Valencia que visita al Girona con la intención de conseguir una victoria cinco jornadas después. Habrá que ver si con el trajín del bolo los de Marcelino acusan esta circunstancia.