F.Estellés/ @siskoestelles
Empate sin goles en Mestalla. El Valencia vuelve a desaprovechar una oportunidad para engancharse definitivamente a los puestos europeos y solo suma un punto. Pese a que fue muy superior durante todo el partido, Diego López o la madera impidieron que los de Marcelino marcaran. El Espanyol apenas existió. El último tramo del partido el Valencia se precipitó y pecó de ansiedad para llegar al gol. Merecieron más los blanquinegres.
Vuelta a la competición doméstica, vuelta a La Liga. El Valencia recibía al Espanyol con el optimismo instalado en la afición blanquinegra. Atrás quedaban las dudas de un equipo que arrancó la temporada de manera irregular. Con el nuevo año, con el inicio de la parte decisiva de la temporada, el Valencia empezaba a carburar y además estaba vivo en todas las competiciones en las que participa.
Con un equipo con ausencias destacadas por las bajas sensibles de Rodrigo, Piccini y Paulista, Marcelino tiraba de rotaciones y ponía de inicio un once compuesto por Neto, Garay, Roncaglia, Gayá y Wass en defensa; con un centro del campo en el que Parejo y Coquelin tenían la llave del equipo acompañados en banda por Ferran y Cheryshev. Arriba, Sobrino debutaba en Mestalla para acompañar a Gameiro en punta.
Dominio total de inicio por parte del Valencia. Con mayor profundidad por la banda izquierda, las dos primeras llegadas se produjeron por la sinistra gracias a la movilidad de Sobrino y las subidas de Gayá. Gameiro, activo en las combinaciones, se entendía con el nuevo delantero del Valencia.
Precisamente, en un centro del lateral de Pedreguer sobre la diagonal de Parejo, supuso la primera ocasión blanquinegra, en el minuto doce, tras fitrar el lateral a la llegada del diez, y este, sutilmente, con la espuela rematara a la derecha de la portería perica defendida por Diego López. Aplausos en Mestalla.
Empèzó a discutirle la posesión el Espanyol al Valencia, sobre todo con el concurso de Darder y Granero, que reclamaban la pelota y lanzaban el juego de los pericos. El Valencia, a la contra, también se sentía cómodo.
Precisamente tras una recuperación en el centro del campo, en el minuto veinti ocho, el balón le llegó a Ferrán, que con un pase milimétrico se la puso de primeras a Gameiro, que sin pensarlo disparó en carrera y mandó el cuero a la escuadra de la meta perica. El chutazo lo repelió la madera. Ocasión clara de gol.
Empezó a ganar protagonismo Ferran con su aparición en banda derecha. Cada vez que el de Foios arrancaba con el balón en los pies, ocurrían cosas; un centro, una asistencia, una pared con los centrocampistas, o ante la subidas de Wass. El canterano crecía a medida que avanzaba el partido. Descanso.
Ocasiones, dominio y falta de puntería
En el minuto cuarenta y ocho, tras una jugada por la derecha que acabó en corner, Garay remataba de cabeza el saque de esquina, ejecutado por Parejo, con un remate picado que se fue a pocos centímetros del palo derecho de la portería de Diego López. Nueva ocasión para el Valencia.
En el cincuenta y cuatro una llegada por la izquierda conducida por Cherysev acabó con un centro al segundo palo donde Rubén Sobrino no pudo rematar encimado por los centrale pericos. El delantero reclamó penalti por empujón. El árbitro no vio nada.
En el cincuenta y siete Rubén Sobrino era sustituido por Guedes. Tanto la retirada del delantero como la entrada del jugador portugués era ovacionada unánimemente por la afición blanquinegra.
En el minuto sesenta en una jugada rápida por la derecha, Wass apuraba linea de fondo y la ponía al punto de penalti para que Parejo rematara y Diego López sacara con los pies cuando ya estaba batido. En la misma jugada se tuvo que revisar por el VAR porque en el rechace Wass fue derribado. Al final el ábitró no apreció nada.
En el minuto sesenta y cuatro, otra rápida jugada por la derecha, acabó con un centro de Guedes que remató acrobáticamente Kevin Gameiro. El Valencia ponía cerco sobre la meta perica. Faltaba afinar la puntería.
Eran los mejores momentos del Valencia, que dominaba al Espanyol y llegaba una y otra vez a la portería de Diego López, En apenas dos minutos el Valencia sacaba tres corners y encerraba a los jugadores de Rubi en su área. La grada entregada a su equipo. Solo faltaba el gol.
Entró Mina por Ferran, instantes antes de que se ejecutara una falta en linea de tres cuartos para el Valencia. El libre directo lo puso Parejo al área para que Roncaglia rematara de cabeza ligeramente a la derecha de Lopez. El Valencia volvía a rozar el gol, que se hacía de esperar.
A cinco minutos para el final el Espanyol intentaba parar el partido mientras el Valencia, con un punto de ansiedad, quería llegar de manera directa a la puerta perica. Los de Marcelino estaban fundidos. La cabeza quería una cosa, pero las piernas no obedecían.Nervios en el campo, en la grada, y un resultado incierto. La ansiedad se apoderaba de los jugadores blanquinegres.
En el minuto ochenta y nueve Gameiro recibió dentro del área un servicio de Gayá pero el jugador galo se llenó de balón y disparó a las nubes. Con cinco minutos de añadido todo podía pasar. Tras una falta sobre el tiempo cumplido, que hasta Neto subió a rematar, acabó el partido con el empate inicial.
Otra vez el Valencia no pasaba de las tablas. Pese a todo, los de Marcelino fueron ovacionados al final del partido.
Ficha técnica
0. Valencia CF: Neto, Wass, Garay, Roncaglia, Gayà, Ferran (Santi Mina, m. 77), Coquelin (Kondogbia, m. 68), Parejo, Cheryshev, Rubén Sobrino (Guedes, m. 57) y Gameiro.
0. RCD Espanyol: Diego López, Rosales, David López, Javi López, Mario Hermoso, Granero, Marc Roca, Darder (Puado, m. 64), Wu Lei (Semedo, m. 71), Borja Iglesias (Ferreyra, m. 78) y Melendo.
Árbitro: De Burgos Bengoetxea, del comité vasco. Amonestó a Coquelin y Roncaglia del Valencia CF, y a Marc López y Granero del RCD Espanyol. Expulsó en el descuento por doble amarilla al visitante Javi López.